sábado, 4 de mayo de 2013

DANOS LA GRACIA DE ENCONTRARNOS


Querida Marilyn,
Que decirte, haz transcurrido una vida llena de obstáculos de circunstancias muy dolorosas y profundas. Admiro el hecho de seguir adelante, al menos los mas que soportaste. El continuar tras una violación cuando tenias no más de 9 años, sola en un orfanato el cual, quizás no te brindo el cariño apropiado, esa  contención que cualquier niño necesita.
Hoy ya no estás entre nosotros, hemos perdido a un ser único, quizás no el modelo a seguir, pero en fin inigualable. Un ser integro que vivió como quiso, o mejor dicho como pudo. Pese a cada error, cada caída, de mala o buena manera intentaste sortearlo. Envuelta en un entorno que comienza siendo muy atractivo y  llamativo, pero que poco a poco te acerca a la soledad, la falsedad, un ambiente donde todo corre por simples apariencias. Te encuentras con ganas de no tener ganas, de despojarte de aquello que tanto trabajo te costo alcanzar. Pasando a ser una cara y cuerpo bonito, influenciada por el que dirán. Bajo el maquillaje se esconden mil y una cosas, sentimientos que no fueron expresados, dolor, soledad, angustia por no encontrar alguien que te valore por lo que realmente eres, por aquello que eres en esencia y no por lo que tienes…
Muchos dicen, que está en uno el enfoque que deseamos darle a nuestras vidas, el sentido y la dirección que elijamos seguir, pero no es tan fácil. Al transcurrir la misma, esta se nos va entornando de tal manera que quizás no sabremos manejar. Lo importante es comprender el regalo que nos ha brindado Dios, la capacidad de amar y de ser amados, de encontrar en los demás un amigo, hermano, un afecto.  Debemos valorar el hecho de vivir, de existir, se ser conscientes de esto tan maravilloso, sacándole “jugo” a cada vivencia. Debemos aprehender de todo los oscuro que se nos presente y  tratar de revertirlo. No dejarse llevar por la presión social y los falsos ideales, tan presentes en nuestra sociedad. Esa que se cree omnipotente, que todo lo sabe, señalando al otro por el mero hecho de juzgarlo. Recayendo sobre él, aislándolo.

Como te decía, no es sencillo aceptarnos, aceptar mi realidad. Pero es necesario hacerlo. La respuesta a todo dolor y sufrimiento es el Amor, el verdadero amor…
“El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no nos envanece, no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido, no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad. El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.” 1 Cor 13, 4-7
Te dedico esta pequeña frase esperando que la escuches, la sientas en donde sea que estés junto a Dios. Deseando que te hayas encontrado allí la divina presencia de Jesús, el cual de seguro ha de sanar todas tus heridas. Lástima que no pudiste ser testigo de eso mismo aquí, en la tierra, junto a nosotros, para ser una más de las misioneras del Señor, transmitiendo su mensaje, dejándolo en el recuerdo latente de la humanidad… (YC)

No hay comentarios:

Publicar un comentario